20091111

Noches eternas

Mi padre me dejo muy pocos recuerdos; los que me quedaron los tengo muy presentes. Uno en particular tiene que ver con la vez, en la que él compro un tocadiscos, con radio FM. Fue todo un acontecimiento en la casa. A pesar de que, él gasto tiempo en dejarme claro que no debía tocarlo/trastearlo sin su presencia, yo esperaba a que se fuese a dormir, para dedicarme a curiosear el pequeño tocadiscos.

De esa cuenta descubri a mis 8 ó 9 años la radio Sonora; -por aquel entonces su fuerte no eran las noticias sino la música popular-. Una de esas noches descubrí en esa emisora el lamento melódico de un personaje que se hacia llamar Rigo Tovar. Me gusto de inmediato el ritmo cadencioso y guashquero de sus canciones y lo pegajoso de las letras.

Muchas veces mi mamá se sorprendió cuando me descubría tarareando algunas de sus canciones; en particular esta: Que eternas son mis noches, que triste es mi agonía, que triste vida mía, vivir pensando en ti... Qué hacía un patojito como yo repitiendo severendas oraciones de tristeza y dolor? A saber!!!

1 comentario:

Seletenango dijo...

Desde chiquito tan cumbiero....